Sin pararte a mirar hacia atrás,
y aún haciéndolo reiteradamente,
sin seguir los pasos que te llevan
hacia delante sin remisión,
deteniéndote. Al borde. De la vida,
Sin ánimo ninguno, así de repente,
vacío, de voluntad, anodino, insulso.
O lanzándote en pos de lo futurible,
auto enardecido por tus propios latidos,
abalanzándote al mañana, valiente,
embaucado por los ajenos suspiros,
carente de control alguno, enajenado,
extasiado por el mero hecho de estar,
y el deseo incontrolable de querer ser,
a pesar de todo y de algunos,
a pesar de uno, y de todos…
la vida sigue…
MrYuse